{"id":1428,"date":"2017-11-29T13:26:27","date_gmt":"2017-11-29T19:26:27","guid":{"rendered":"http:\/\/laenciclopediagalactica.info\/?p=1428"},"modified":"2017-11-29T13:26:27","modified_gmt":"2017-11-29T19:26:27","slug":"vida-extraterrestre-inicio-del-concepto","status":"publish","type":"post","link":"http:\/\/laenciclopediagalactica.info\/2017\/11\/29\/vida-extraterrestre-inicio-del-concepto\/","title":{"rendered":"Vida Extraterrestre \u2013 Inicio del Concepto"},"content":{"rendered":"
Un platillo plateado flotante, tal vez puntuado con luces de colores. Un diminuto ser gris, con ojos grandes, negros, sin alma, con forma de almendra. Voces fantasmales y telep\u00e1ticas. Una losa dura y g\u00e9lida. Instrumentos m\u00e9dicos de plata. Empujones y golpes, especialmente alrededor de la ingle. Luego regresas a donde estabas, con una inquietud y un per\u00edodo de tiempo sin explicaci\u00f3n.Estos son los elementos de muchos cuentos alien\u00edgenas modernos. Durante m\u00e1s de 70 a\u00f1os, la humanidad ha construido lentamente un mito alrededor de los extraterrestres. Incluso aquellos de nosotros que no tenemos experiencia personal con OVNIs, platillos voladores, o algo por el estilo conocemos la historia. En este blog, platicaremos de d\u00f3nde han surgido esos elementos. Como veremos, esa narraci\u00f3n particular es reciente, construida a partir de un pu\u00f1ado de cuentos de progenitores y reforzada por el hecho de que se le repite una y otra vez tanto persona como persona en los medios.<\/p>\n
Pero, aunque la fascinaci\u00f3n del p\u00fablico en general por la cuesti\u00f3n de la vida extraterrestre ha crecido enormemente en el \u00faltimo siglo, el inter\u00e9s no es nuevo.<\/p>\n
En esta entrada, te encontrar\u00e1s con eruditos del Renacimiento que hicieron la pregunta (Y algunos que murieron por su temeridad). Aprender\u00e1 sobre las ideas presentadas en el siglo diecinueve, algunas de buena fe y algunas falsificaciones para generar publicidad. Aprender\u00e1 sobre lo que nuestros antepasados \u200b\u200bpensaron sobre nuestros vecinos celestiales: la Luna y Marte.<\/p>\n
Y entonces comenzamos. Para discutir lo que significa la existencia de vida extraterrestre, primero debemos responder una pregunta diferente, espec\u00edficamente la de si existen otros planetas. Despu\u00e9s de todo, si no hay otros planetas, es dif\u00edcil siquiera preguntar si la vida existe en lugares distintos de la Tierra.<\/p>\n
La historia comienza, como ocurre a menudo, con los primeros griegos. Los escritos de Arist\u00f3teles tuvieron el mayor impacto en la cuesti\u00f3n, y su argumento se arraig\u00f3 en su f\u00edsica y cosmolog\u00eda. Por ejemplo, Arist\u00f3teles postul\u00f3 un universo geoc\u00e9ntrico, en el cual la Tierra estaba en el centro, rodeada por una esfera de estrellas en posiciones fijas. Entre los dos hab\u00eda otras esferas, cada una con el sol, la luna y los planetas errantes. Estos planetas errantes no se imaginaron que fueran similares a la Tierra. Las teor\u00edas f\u00edsicas de Arist\u00f3teles postulaban cuatro elementos: aire, fuego, tierra y agua. \u00c9l afirm\u00f3 que cada uno de ellos ten\u00eda una afinidad natural. La Tierra se hundi\u00f3 hacia el planeta, el fuego huy\u00f3 del planeta, mientras que el agua y el aire ten\u00edan afinidades intermedias. De acuerdo con su l\u00f3gica, esto implicaba que no podr\u00eda haber m\u00e1s que un planeta.<\/p>\n
De lo contrario, la tierra no sabr\u00eda d\u00f3nde caer… hacia nuestro planeta o hacia alg\u00fan otro. La l\u00f3gica era simple y la conclusi\u00f3n convincente. (Tambi\u00e9n es una acusaci\u00f3n mordaz del papel de la l\u00f3gica pura en el discurso cient\u00edfico sin orientaci\u00f3n emp\u00edrica.) Si bien hubo ideas de la competencia en ese momento, la posici\u00f3n de Arist\u00f3teles domin\u00f3 el pensamiento acad\u00e9mico durante unos 2,000 a\u00f1os, aproximadamente.<\/p>\n
Si la cuesti\u00f3n de la vida extraterrestre depend\u00eda primero de la existencia de planetas no terrestres, la primera grieta en la armadura de la l\u00f3gica aristot\u00e9lica se puede remontar a Nicol\u00e1s Cop\u00e9rnico. Justo antes de su muerte en 1543, se public\u00f3 su libro Sobre las Revoluciones de las Esferas Celestiales (De revolutionibus orbium coelestium<\/em>). En \u00e9l, postul\u00f3 una cosmolog\u00eda muy diferente. En su teor\u00eda helioc\u00e9ntrica, el sol estaba en el centro del universo y todos los planetas, incluido el nuestro, giraban en torno a \u00e9l. Y, por supuesto, si la Tierra no es central para el universo, entonces es probable que tampoco lo sea la humanidad. Cop\u00e9rnico no escribi\u00f3 acerca de las implicaciones de su teor\u00eda sobre la cuesti\u00f3n de la vida extraterrestre, pero para otros era claro que lo persegu\u00edan.<\/p>\n El fraile dominico Giordano Bruno, nacido apenas cinco a\u00f1os despu\u00e9s de la muerte de Cop\u00e9rnico, era un poco del tipo \u201ccat\u00f3lico chico malo\u201d. Eventualmente quemado en la hoguera por herej\u00edas religiosas, cuestion\u00f3 muchas de las ideas aceptadas en ese momento. Pertinente a nuestros intereses aqu\u00ed, postul\u00f3 que, si nuestro sol era una estrella rodeada de planetas, entonces todas las estrellas ser\u00edan soles rodeados de planetas. Si nuestro planeta ten\u00eda vida, entonces otros tambi\u00e9n lo tendr\u00edan.<\/p>\n El Mensajero Sideral (Sidereus nuncius<\/em>) de Galileo, publicado en 1610, redujo a\u00fan m\u00e1s la idea del \u2018excepcionalismo\u2019 terrestre. Vio las lunas de J\u00fapiter y describi\u00f3 la superficie de la luna de la Tierra como monta\u00f1as y topograf\u00eda similar a la Tierra. Su contempor\u00e1neo Johannes Kepler fue a\u00fan m\u00e1s aventurero, sugiriendo que la luna estaba habitada, con personas viviendo en cuevas en el lado de los cr\u00e1teres. El \u2018genio de los extraterrestres\u2019 estaba fuera de la botella.<\/p>\n Los a\u00f1os siguientes involucraron discusiones t\u00edpicas del per\u00edodo entre te\u00f3logos, fil\u00f3sofos y cient\u00edficos nacientes. En un per\u00edodo en el que la instrumentaci\u00f3n cient\u00edfica no fue suficiente para resolver el debate (Un estado de cosas que persiste hoy en d\u00eda), no es sorprendente que imagines a las personas inteligentes de la \u00e9poca intentar razonar y proponer muchas hip\u00f3tesis. No hubo un ganador convincente en el debate sobre si otros mundos llevaban vida. Sab\u00edamos que hab\u00eda otros planetas en nuestro sistema solar y que otras estrellas albergar\u00edan sus propios planetas. Pero, en un per\u00edodo de la historia en el que personas cultas cre\u00edan que la vida proven\u00eda de un Creador, a diferencia de los procesos naturales, es dif\u00edcil imaginar un progreso sustancial en la cuesti\u00f3n sobre la base de la raz\u00f3n sola.<\/p>\n Dos avances importantes en el conocimiento cient\u00edfico en la d\u00e9cada de 1850 y 1860 pusieron la discusi\u00f3n en un terreno m\u00e1s s\u00f3lido. Primero, Charles Darwin public\u00f3 su teor\u00eda de la evoluci\u00f3n en 1859, que ten\u00eda una implicaci\u00f3n obvia para la vida extraterrestre como lo fue para la variante terrenal (On the Origin of Species<\/em>). En segundo lugar, la d\u00e9cada de 1860 fue la d\u00e9cada en la que los f\u00edsicos comenzaron a usar la espectroscopia de una manera seria. La espectroscopia temprana us\u00f3 prismas para separar la luz en sus colores constituyentes. Por ejemplo, estudiar la luz absorbida o emitida por un gas permite a los cient\u00edficos determinar su composici\u00f3n. En 1868, las investigaciones espectrosc\u00f3picas de la luz emitida por el sol revelaron una l\u00ednea amarilla brillante que no pod\u00eda atribuirse a los elementos conocidos, lo que llev\u00f3 a Sir Norman Lockyear a postular que el sol conten\u00eda un elemento desconocido que \u00e9l llamaba helio (Basado en el Dios Griego Helios). Esencialmente, la espectroscopia permiti\u00f3 a los cient\u00edficos hacer un an\u00e1lisis qu\u00edmico sin tocar el objeto que se estudia.<\/p>\n De manera similar, los cient\u00edficos podr\u00edan utilizar sus espectroscopios en luz proveniente de los planetas del sistema solar. Al estudiar el espectro, es posible determinar las sustancias en la atm\u00f3sfera planetaria. La observaci\u00f3n de ox\u00edgeno, nitr\u00f3geno y agua indicar\u00eda que la atm\u00f3sfera del planeta era como la nuestra, donde sabemos que existe la vida. Combinado con el conocimiento que obtenemos de la evoluci\u00f3n, parece probable que la vida se pueda formar en cualquier lugar donde haya un ambiente favorable. No es un argumento herm\u00e9tico, pero ciertamente es plausible y volveremos hacia \u00e9l, en alguna publicaci\u00f3n posterior. Desde mediados hasta finales de 1800 marca el punto donde las respuestas a la cuesti\u00f3n de la vida extraterrestre se hicieron accesibles a trav\u00e9s del dominio de los instrumentos cient\u00edficos.<\/p>\n En este per\u00edodo, los telescopios fueron lo suficientemente buenos como para poder estudiar la superficie de la luna en detalle. Para todos, excepto algunos exc\u00e9ntricos, estaba claro que era una pelota sin vida, o al menos eso parec\u00eda. Sin agua, sin atm\u00f3sfera, nada m\u00e1s que rocas y cr\u00e1teres. Con la luna fuera de la imagen, la atenci\u00f3n del cient\u00edfico se dirigi\u00f3 a Marte y Venus, ya que eran nuestros vecinos planetarios. En una entrada posterior, me gustar\u00eda tocar esta fascinaci\u00f3n con los vecinos hablando sobre extraterrestres en la ciencia ficci\u00f3n.<\/p>\n 1835 La Farsa de la Luna<\/em><\/p>\n Antes de continuar nuestra historia de la b\u00fasqueda de la vida extraterrestre en los planetas cercanos, debemos recordar que este tema no trata solo de lo que piensan y piensan los cient\u00edficos, sino tambi\u00e9n de lo que piensa el p\u00fablico. Antes de que la ciencia pudiera desacreditar por completo la idea, la posibilidad de vida lunar se ve\u00eda como plausible. Una serie de historias en el New York Sun<\/em> en agosto de 1835 trajeron a los extraterrestres a sus lectores de una manera dram\u00e1tica y llamativa.<\/p>\n Para comprender mejor el cuento, se requiere retroceder en el tiempo unos cinco a\u00f1os antes de que comience y echar un vistazo al periodismo de principios del siglo XIX. En 1830, los peri\u00f3dicos eran diferentes de los que tenemos ahora. Habitualmente, solo hab\u00eda dos tipos de peri\u00f3dicos en esa \u00e9poca: los pol\u00edticos y los comerciales. Los pol\u00edticos fueron publicados por los partidos pol\u00edticos para avanzar en su agenda espec\u00edfica, mientras que los comerciales fueron escritos para que la comunidad empresarial informara a los ricos sobre lo que estaba sucediendo en la esfera econ\u00f3mica. Los equivalentes modernos de este \u00faltimo podr\u00edan ser el Wall Street Journal o el Financial Times. Los peri\u00f3dicos se vend\u00edan por suscripci\u00f3n y costaban seis centavos por d\u00eda o unos veinte d\u00f3lares al a\u00f1o. Eso era bastante dinero en ese momento, y, en consecuencia, los peri\u00f3dicos tend\u00edan a ser le\u00eddos a detalle y pod\u00edan tener una circulaci\u00f3n de cien a doscientos lectores. Los peri\u00f3dicos eran conservadores, porque tend\u00edan a respaldar el material en sus p\u00e1ginas. (Aunque su pol\u00edtica podr\u00eda no ser conservadora, de hecho, podr\u00edan ser bastante radicales.) En cierto modo, llevar un anuncio era un respaldo.<\/p>\n El mundo cambi\u00f3 el 3 de septiembre de 1833, cuando Benjamin Day comenz\u00f3 a publicar el New York Sun. Tal vez la historia m\u00e1s famosa escrita en el Sol fue el editorial de 1897 \u00ab\u00bfHay un Santa Claus?\u00bb (M\u00e1s com\u00fanmente llamado \u00abS\u00ed, Virginia, hay un Santa Claus\u00bb). Sin embargo, en 1833, el Sun cambi\u00f3 las reglas del juego, ya que se vend\u00eda por un centavo por copia. Fue el primero de los peri\u00f3dicos en la ciudad de Nueva York que se convirti\u00f3 en lo que se conoc\u00eda como la \u00abprensa de centavos\u00bb. Debido a que el costo era menor, la \u00fanica forma en que los peri\u00f3dicos como \u00e9l pod\u00edan mantenerse en el negocio era a trav\u00e9s de las ventas por volumen. La frase \u00abExtra, extra, lea todo al respecto\u00bb surgi\u00f3 a partir de este momento. En los meses previos a la historia que estoy a punto de contar, la circulaci\u00f3n diaria del New York Sun hab\u00eda alcanzado unas 20,000 copias. Las prensas de centavos estaban m\u00e1s cerca de lo que actualmente llamamos tabloides, llenas de rumores e historias del papel secante de la polic\u00eda, llenas de detalles salaces. Si llevaban un anuncio, ciertamente no implicaba un endoso. Los lectores esperaban ser entretenidos e informados. Y, como veremos, de uno de esos peri\u00f3dicos surgi\u00f3 uno de los primeros frenes\u00edes medi\u00e1ticos. El viernes, 21 de agosto de 1835, el Sun public\u00f3 un peque\u00f1o aviso en la segunda p\u00e1gina del peri\u00f3dico: \u00abAcabamos de enterarnos por medio de un eminente editor en esta ciudad que Sir John Herschel en el Cabo de Buena Esperanza ha realizado algunos descubrimientos astron\u00f3micos de la descripci\u00f3n m\u00e1s maravillosa, por medio de un inmenso telescopio de un principio completamente nuevo \u00ab.<\/p>\n Sir John Herschel fue un excelente cient\u00edfico y matem\u00e1tico. Hijo de Sir William Herschel (Descubridor del planeta Urano), construy\u00f3 un telescopio con un di\u00e1metro de 18 pulgadas y una distancia focal de 20 pies que le permiti\u00f3 explorar el espacio con gran detalle. Por su trabajo cient\u00edfico, fue nombrado Caballero de la Real Orden G\u00fclfica en 1831. Parti\u00f3 de Inglaterra hacia Sud\u00e1frica en el oto\u00f1o de 1834, llevando su telescopio consigo. El objetivo era estudiar el cielo del sur. Dada la reputaci\u00f3n de Hershel, tal vez no sea sorprendente ver un anuncio de su trabajo si hubiera avanzado en la instrumentaci\u00f3n astron\u00f3mica. El p\u00fablico de 1835 estaba tan fascinado por el espacio como lo estamos hoy. Otros peri\u00f3dicos en Nueva York no mencionaron el anuncio. El martes 25 de agosto, el Sun comenz\u00f3 a publicar una serie de columnas durante seis d\u00edas describiendo la observaci\u00f3n de la vida en la superficie de la luna. Y no solo se observaron las formas de vida ordinarias, sino la vida inteligente con una civilizaci\u00f3n avanzada. Sin embargo, el primer d\u00eda fue un poco m\u00e1s ordinario.<\/p>\n Describi\u00f3 un nuevo telescopio. La serie de columnas se titul\u00f3 \u201cGreat Astronomical Discoveries Lately Made by Sir John Herschel<\/em>\u201d (Grandes Descubrimientos Astron\u00f3micos Realizados Recientemente por Sir John Herschel) y se supon\u00eda que ser\u00eda una reimpresi\u00f3n de un suplemento del Edinburgh Journal of Science<\/em>. En esencia, esto era como si el peri\u00f3dico estuviese reimprimiendo un n\u00famero especial de una revista cient\u00edfica escocesa, aunque el editor les dijo a los lectores que algunos detalles t\u00e9cnicos y matem\u00e1ticos hab\u00edan sido omitidos. El art\u00edculo del peri\u00f3dico fue acompa\u00f1ado por una nota editorial que dec\u00eda: \u00abComenzamos esta ma\u00f1ana la publicaci\u00f3n de una serie de extractos del nuevo Suplemento de la Revista de Ciencia de Edimburgo (Edinburgh Journal of Science)<\/em>, que nos han sido cort\u00e9smente provistos por un caballero m\u00e9dico de Escocia, como consecuencia de un p\u00e1rrafo que apareci\u00f3 el viernes pasado en el Courant de Edimburgo. La porci\u00f3n que publicamos hoy es una introducci\u00f3n a los descubrimientos celestiales de mayor inter\u00e9s y m\u00e1s universal que cualquier otro, en cualquier ciencia a\u00fan conocida por la raza humana\u00bb. Sin embargo, en realidad, el Edinburgh Journal of Science<\/em> hab\u00eda suspendido la publicaci\u00f3n dos a\u00f1os antes, pero eso era no conocido de manera extensa.<\/p>\n El primer d\u00eda describi\u00f3 un nuevo telescopio, con una lente de 24 pies de di\u00e1metro, hecho de excelente vidrio. El peso de la lente era de un poco m\u00e1s de siete toneladas. Eso s\u00ed, el telescopio m\u00e1s grande jam\u00e1s construido con una lente (en lugar de un espejo) ten\u00eda un di\u00e1metro de 49 pulgadas. Pero el telescopio se volvi\u00f3 a\u00fan m\u00e1s extravagante. Debido a su gran tama\u00f1o, era capaz incluso de estudiar \u00abla entomolog\u00eda de la luna, en caso de que ella tuviera insectos sobre su superficie\u00bb. Esa es una afirmaci\u00f3n bastante impresionante. Adem\u00e1s del gran telescopio, el excelente rendimiento fue posible gracias al uso de un \u00abmicroscopio de hidro-ox\u00edgeno\u00bb para iluminar la imagen. Esencialmente, la afirmaci\u00f3n era que el telescopio alimentado en un microscopio y por lo tanto la capacidad de estudiar de cerca la superficie de la luna se logr\u00f3.<\/p>\n Si lees el art\u00edculo original, te sorprenden la presencia de muchos detalles que lo hacen sonar m\u00e1s aut\u00e9ntico, como el fabricante de la lente, el nombre del asistente de Herschel y la relaci\u00f3n del asistente con el famoso padre de Herschel. Hoy en d\u00eda, esta atenci\u00f3n a los detalles suena como el resultado de un periodista de investigaci\u00f3n dotado y diligente. Sin embargo, como veremos, fue un cuento encantador, contado con suficiente detalle para convencer a muchos lectores.<\/p>\n El segundo d\u00eda de la saga comenz\u00f3 con una discusi\u00f3n sobre por qu\u00e9 era necesario colocar el telescopio en el hemisferio sur, pero finalmente se convirti\u00f3 en intrascendente y describi\u00f3 lo que Herschel vio mientras miraba la superficie de la luna o, como declaraba el art\u00edculo, \u00abYa no ocultar\u00e9 a nuestros lectores los descubrimientos m\u00e1s generales y altamente interesantes que se hicieron en el mundo lunar\u00bb. \u00bfQu\u00e9 vio \u00e9l?<\/p>\n Bueno, lo primero que se observ\u00f3 fue roca bas\u00e1ltica, pero cuando la Tierra cambi\u00f3, lo que se movi\u00f3 a su campo de visi\u00f3n fue un estante de roca \u00abprofusamente cubierto con una flor roja oscura\u00bb, similar a las amapolas rosadas vistas en los campos de ma\u00edz terrenales. M\u00e1s inspecciones revelaron \u00e1rboles, pero solo uno, grande y con reminiscencias de tejos en la Tierra. Se hab\u00eda observado vida alien\u00edgena, pero solo de la variedad vegetal.<\/p>\n La b\u00fasqueda posterior revel\u00f3 cristales hermosos, enormes, violetas, vibrantes de color y bermell\u00f3n. Paisajes m\u00e1s all\u00e1 de lo imaginable y un vasto bosque, esta vez con \u00e1rboles \u00abde todo tipo imaginable\u00bb, el autor report\u00f3 continuas manadas de cuadr\u00fapedos marrones que se parec\u00edan mucho al bisonte. Los bisontes fueron seguidos por gregarios, cabras-unicornio \u00abazuladas tipo plomo\u00bb. Pel\u00edcanos, grullas, una criatura anfibia, esf\u00e9rica extra\u00f1a que rodaba a lo largo de las playas: se hab\u00eda observado la vida animal.<\/p>\n El art\u00edculo del d\u00eda tres hablaba de m\u00e1s geolog\u00eda y la primera observaci\u00f3n de vida lunar inteligente, aunque primitiva. Esta vida tom\u00f3 la forma de un b\u00edpedo, sin cola, un castor que llevaba a sus cr\u00edas en sus brazos y viv\u00eda en peque\u00f1as chozas. El humo en las proximidades de las caba\u00f1as revel\u00f3 que los castores hab\u00edan conquistado el fuego. Seg\u00fan el art\u00edculo, la cuesti\u00f3n de la vida inteligente extraterrestre hab\u00eda sido definitivamente respondida, aunque lo mejor estaba por venir.<\/p>\n El d\u00eda cuatro fue tal vez el punto culminante de la narraci\u00f3n, cuando se observaron humanoides inteligentes. Ten\u00edan cerca de cuatro pies de alto y estaban cubiertos con cabello corto y brillante color cobre, excepto en sus rostros. Sus rostros eran amarillentos, similares a un orangut\u00e1n. Tambi\u00e9n ten\u00edan alas. Las alas ten\u00edan forma de murci\u00e9lago, por lo que el autor las llam\u00f3 Vespertilio-Homo (U hombre murci\u00e9lago). Mientras los observadores ve\u00edan el comportamiento de las criaturas, el art\u00edculo aplaz\u00f3 una discusi\u00f3n sobre lo que vieron para un art\u00edculo posterior y m\u00e1s detallado. La humanidad ya no estaba sola en el universo.<\/p>\n \u00a0<\/strong>Ser\u00eda dif\u00edcil para el d\u00eda cinco eclipsar las revelaciones del d\u00eda anterior. La costumbre literaria requiere un desenlace. El art\u00edculo discuti\u00f3 m\u00e1s geolog\u00eda, observaciones de oc\u00e9anos, islas, etc. Sin embargo, un valle particular destacaba con colinas construidas de m\u00e1rmol blanco como la nieve o tal vez cristal semitransparente y adyacentes a una monta\u00f1a en llamas, ya que en este valle se levantaba lo que parec\u00eda ser un templo abandonado, de forma triangular y hecho de puro zafiro. El techo estaba construido de un metal amarillo, con forma de llama en la construcci\u00f3n. Como el templo parec\u00eda abandonado y todos los observadores vieron vuelos de palomas lunares que aterrizaban en los pin\u00e1culos del techo, no pudieron especular sobre el significado de las im\u00e1genes del templo. Una b\u00fasqueda m\u00e1s profunda revel\u00f3 otros dos templos ubicados a una distancia lejana.<\/p>\n \u00a0<\/strong>El d\u00eda seis fue la \u00faltima entrega de la saga de Vespertilio-Homo. Los astr\u00f3nomos vieron m\u00e1s murci\u00e9lagos, esta vez m\u00e1s cerca de los templos. Estos murci\u00e9lagos eran m\u00e1s grandes que los anteriores, de color m\u00e1s claro y \u00aben todos los aspectos una variedad mejorada de la raza\u00bb. Felices y sociables, estas nuevas personas se sentaron en grupos pasando el tiempo, \u00abNo tuvimos oportunidad de verlos en realidad dedicado a cualquier trabajo de la industria o el arte; y hasta donde pudimos juzgar, pasaron sus horas felices recogiendo varias frutas en el bosque, comiendo, volando, ba\u00f1\u00e1ndose y holgazaneando en las cumbres de los precipicios \u00ab. Con estas observaciones, el finaliza el registro del estudio de Vespertilio-Homo.<\/p>\n \u00a0<\/strong>El art\u00edculo contin\u00faa diciendo que los astr\u00f3nomos dejaron el telescopio y se acostaron, solo para despertarse al d\u00eda siguiente y descubrir que el telescopio se hab\u00eda alineado inadvertidamente con el sol y la imagen resultante comenz\u00f3 a incendiar el edificio. Afortunadamente, no se hab\u00eda producido ning\u00fan da\u00f1o grave, pero tardaron varios d\u00edas en limpiar el holl\u00edn y el desorden, momento en el que la luna ya no se encontraba en el cielo nocturno. Herschel luego se dedic\u00f3 a estudiar los anillos de Saturno, que descubri\u00f3 que eran restos de dos mundos que hab\u00edan colisionado.<\/p>\n \u00a0<\/strong>Herschel estaba ocupado catalogando sus observaciones de estrellas que hab\u00eda visto, por lo que sus asistentes volvieron a mirar a la luna, esta vez viendo una forma incluso superior de Vespertilio-Homo. \u00abEran de una belleza personal infinitamente mayor, y aparecieron en nuestros ojos apenas menos bellos que las representaciones generales de los \u00e1ngeles por las escuelas de pintores m\u00e1s imaginativas\u00bb. El autor (uno de los asistentes de Herschel) concluy\u00f3 diciendo que postergar\u00eda la discusi\u00f3n de estas personas angelical murci\u00e9lago hasta Herschel podr\u00eda escribir algo \u00e9l mismo. Huelga decir que el Herschel real no tuvo parte en esto. En realidad, estaba investigando al sur del ecuador y se sinti\u00f3 m\u00e1s que ofendido cuando m\u00e1s tarde escuch\u00f3 las libertades que se hab\u00edan tomado con su reputaci\u00f3n.<\/p>\n \u00a0<\/strong>Entonces terminaron las seis columnas en el Sun<\/em>. \u00bfQu\u00e9 impacto tuvieron estas columnas en el p\u00fablico? Bueno, simplemente, fue enorme. El Sun<\/em> vendi\u00f3 su circulaci\u00f3n total de aproximadamente 20,000 ejemplares. Adem\u00e1s, los peri\u00f3dicos que compiten en Nueva York reimprimieron la historia. Aproximadamente 100,000 copias del art\u00edculo se imprimieron solo en la ciudad de Nueva York (en un momento en que la poblaci\u00f3n de Nueva York era de solo 300,000). Sin radio, ni siquiera con tel\u00e9grafo, la historia viaj\u00f3 por todo el pa\u00eds con relativa lentitud, aunque lleg\u00f3 en las principales ciudades del este como Boston, Filadelfia y Baltimore en cuesti\u00f3n de d\u00edas. Les tom\u00f3 un par de semanas llegar al Medio Oeste y un mes a Europa. Revistas en ingl\u00e9s y franc\u00e9s reimprimieron los art\u00edculos, sin nombrar el origen del material como un peri\u00f3dico de prensa de centavos en los Estados Unidos. La historia incluso se reimprimi\u00f3 en Edimburgo. Dado que el Sun<\/em> atribuy\u00f3 la fuente original al Courant<\/em> de Edimburgo, presumiblemente los escoceses sab\u00edan que era falso, pero lo reimprimieron de todos modos.<\/p>\n Si bien la circulaci\u00f3n del Sol no cambi\u00f3 dr\u00e1sticamente con la historia, s\u00ed imprimieron un folleto que conten\u00eda las seis columnas, acompa\u00f1ado de varias litograf\u00edas que mostraban representaciones imaginarias de los descubrimientos de Herschel. Uno de estos se reproduce en la siguiente figura, mientras que el Sun <\/em>nunca revel\u00f3 cu\u00e1ntos panfletos se vendieron, los escritores posteriores estimaron que el n\u00famero ser\u00eda de aproximadamente 60,000. A un costo de doce centavos por panfleto, el Sun <\/em>termin\u00f3 ganando bastante dinero.<\/p>\n